No pidas perdón por amar. ¿No es justo? No, quizá no pero que es la justicia sino
un espejismo de lo que debería ser. Todos sabemos que lo normal no es lo común,
así pues ¿para que descoser este espejismo si ya sabemos que detrás no hay
nada? Sabes lo que es la justicia y no. Sabes lo que es el amor y no. Este texto
des de su principio es indecente. Esta carente de criterio. Su falta de
sentimiento es lo que hace de él un texto injusto e irracional. Hablo de la
justicia en el sentimiento, no de los sentimientos que nos da la justicia, o
más bien la falta de ella. ¿Para qué llorar? ¿Qué más da? Sí, te lo pregunto a
ti estúpida sombra de esto a lo que llamo razón! Ah ¿que no tienes respuesta
para ello? A veces, muchas veces de hecho, no eres capaz de dar cobijo a los
que necesitamos un poco de tu anhelado aire. Quizá es que nos han vendido
un retrato de la realidad que no es cierto. Quizá no estamos hechos para ser
justos y por eso ahogamos los pensamientos entre los sentimientos. Llorar como vía
de escape, gritar para encontrar ese pequeño lugar mejor en un mundo hostil. Y aún así tú no eres capaz de cobijar a quién llora o grita de
injusticia porque sabes que si lo haces serás traicionera… razón eres efímera y
no puedes asegurar nada hoy por hoy. Cómo todo, no es justo, pero amar por amar
es peor y es un mero insulto a la propia palabra. Así que no pidas perdón por
amar que mientras no sea doble no habrá falta de justicia y al fin y al cabo
siempre me quedará la razón para aguantar la vela de la realidad que a estas
horas de la noche mejor que se apague. Repito, no pidas perdón y si lo haces
que no sea por amar.
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